Paquale Caprile |
Lomografía,
es una corriente fotográfica de gran difusión en todo el mundo convertido en un
fenómeno de culto y cuyo nombre proviene de las cámaras compactas de marca soviética
LOMO.
Estas
Cámaras empezaron a producirse de forma masiva en Rusia en 1984, pero su difusión
no empezaría hasta 1991, cuando un grupo de estudiantes las descubrió en una
extravagante tienda durante sus vacaciones en Praga.
Nicole Cooper |
Tal
fue el aumento de las demandas de estas cámaras, que en 1993 se fundó la Sociedad Lomográfica
Internacional. A partir de esta fecha, y hasta la fecha, ha ido creciendo la
popularidad de esta corriente, que se convierte casi en un estilo de vida,
organizándose Congresos Mundiales, creándose nuevos modelos de cámaras lomográficas
y accesorios y abriendo tiendas especializadas por todo el mundo.
Las
características principales que hacen tan atractivas estas fotografías son
precisamente los defectos que se producen: desenfocados, viñeteados característicos,
fugas de luz, saturación del color, etc.
Bajo
el lema “no pienses, dispara”, la tomografía se rige por 10 reglas de oro:
1.-
Lleva siempre la cámara contigo.
2.-
Utilízala de día y de noche.
3.-
Lomografiar no interrumpe tu vida cotidiana, la pone en escena.
4.-
Disparar desde la mano, no desde la cara.
5.-
Acércate todo lo que puedas a tu objetivo.
6.-
No pienses.
7.-
Sé rápido.
8.-
No es necesario saber lo que tienes en el carrete en el momento.
9.-
Después tampoco.
10.-
No te preocupes por ninguna de estas
reglas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario