INDICADORES:
La procedencia de las personas que trabajan en la
organización de organizaciones del campo social.
El compromiso social de las personas que trabajan en la
organización.
La emergencia de la propia organización de consultoría de
organizaciones o redes de iniciativa social, intervención social...
Los enfoques y las prácticas de responsabilidad social de la
organización.
La dedicación fundamental a servir a organizaciones de
intervención social.
Un comportamiento que privilegia relaciones de
complementariedad y colaboración frente a relaciones de exclusión y
competencia.
La supeditación del beneficio económico al impacto social.
La incorporación de la acción voluntaria en la actividad de
la organización.
El carácter participativo de los procesos de la
organización.
La realización de actividades en colaboración con otras
organizaciones de consultoría social y con otras organizaciones de iniciativa
social, intervención social...
La socialización de la información.
La socialización de los beneficios económicos obtenidos
hacia dentro y hacia fuera de la organización.
DE LO SOCIAL:
Somos lo que sabemos: humanos
cargados de capacidades, conocimientos, vínculos.
Las interacciones, colaboraciones
y alianzas con otras consultorías pueden desencadenar sinergias beneficiosas
para las organizaciones y, en definitiva, para las personas destinatarias de las
intervenciones sociales, es decir, para el conjunto de la sociedad. Compartir
la experiencia de las consultoras
contribuye a identificar y preservar la aportación histórica del tercer sector
de intervención social al acerbo común por lo que respecta a los modelos de
gestión (de calidad) de intervención, de manera que independientemente de quien
sea el sujeto de la intervención y la gestión (organizaciones del tercer
sector, empresas, administraciones públicas,..) se preserven en el ámbito de la
intervención social principios y modos de actuación que se consideran válidos
en sí mismos (personalización de la atención, integralidad… ) y se incorporen a
los modelos generales de gestión (gestión de la calidad…) las buenas prácticas
que caracterizan al tercer sector de intervención social.
ANÁLISIS DEL SECTOR (DAFO):
FORTALEZAS:
Especialización por experiencia en el sector. Diversidad
profesional. Creatividad y vínculos de confianza con las organizaciones a as
que apoyamos, vínculos estrechos con las redes del sector. Capacidad del efecto
multiplicador.
DEBILIDADES:
Débil posicionamiento de las organizaciones de consultoría
social en el ámbito más general de la consultoría. Precios inaccesibles para
algunas organizaciones.
OPORTUNIDADES:
Velocidad y profundidad de los cambios sociales,
expectativas sociales hacia el sistema del bienestar, nuevas políticas
públicas, la propia maduración del sector social, la rigidez de las
administraciones públicas, el crecimiento
de la conciencia de las organizaciones de necesitar consultoría social,
líneas de financiación para procesos, en los que es necesaria la consultoría,
prácticas provenientes de la Unión Europea.
AMENAZAS:
Mercantilización de la intervención social y del propio
tercer sector, el desembarco de empresas de consultoría no especializadas y que
operan con criterios opuestos a la filosofía del sector. El insuficiente
aprecio de los servicios de consultoría por parte de algunas organizaciones del
sector. Que se pueda imponer un modelo único o un monopolio en el ámbito de la
consultoría social.
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